Abr 24, 2020 | Colima

Por Juan Ramón Negrete Jiménez

Colima, Col., 24 de abril de 2020.- Los introductores de ganado y los tablajeros que venían trabajando con la Procesadora Municipal de Carne, propusieron al presidente municipal de Coquimatlán, J. Guadalupe Benavides, la posibilidad de que firme un convenio  con el Ayuntamiento de Colima, para que reabra la procesadora y sea quien la administre.

Lo anterior fue declarado por el representante de los introductores de ganado, Raúl Barragán, quien dijo que este jueves acudieron ante la autoridad municipal de Coquimatlán, donde fueron atendidos por el Secretario del Ayuntamiento, a quien le pidieron hacer saber al alcalde J. Guadalupe Benavides, signar un convenio, “y aunque fuimos recibidos amablemente por el Secretario, y él nos afirmó que ese convenio no se firmó y no lo hizo porque no existe, ellos no tienen las condiciones para poder ofrecer el servicio de rastro por el volumen de la matanza que tenemos que realizar”.

Destacó que la autoridad municipal de Coquimatlán se ve impedida a signar ese convenio, “y eso habla de la responsabilidad con la que el presidente municipal está atendiendo esta situación, él se ve rebasado en su capacidad para poder darse abasto con la matanza, entonces le propusimos que mejor administre el rastro de Colima”.

“Si el presidente municipal Leoncio Morán no tiene la capacidad de poderlo hacer por las razones que sean, bueno entonces que la Procesadora sea administrada por el presidente municipal de Coquimatlán, porque si allá en su cabecera municipal le está generando un problema la matanza en estos momentos, y se le están generando problemas de salubridad, de aglomeración, de drenaje, porque al incrementar la matanza, le estamos generando otros problemas a la comunidad de Coquimatlán, porque el presidente no estaba preparado para recibir este servicio y el alcalde Guadalupe Benavides, está siendo muy consciente de esa situación y tan es así que se negó a firmar responsablemente un convenio que hubiera llevado posteriormente al fincamiento de responsabilidades por el lado que sea”.

Entonces, dijo el dirigente de los introductores de carne, que “algo que le ofrecíamos al alcalde a través del Secretario del Ayuntamiento de Coquimatlán, fue que aprovechando que le están ofreciendo firmar un convenio de prestación de un servicio, porque mejor no firman un convenio de asociación, donde el Ayuntamiento de Colima pone el inmueble del rastro que antes tenía la procesadora, que Coquimatlán sea quien lo administre y ponga la gente”.

A los tablajeros no les importa quién sea quien lo administre, sino tener el servicio y contar con un servicio que sea una garantía de que el ganado cuando llega a las instalaciones a cuando la gente lo consume, es un ganado sano, es una carne sana, afirmó Raúl Barragán.

Afirmó el dirigente de los introductores de ganado, que incluso existen las bases para que sea Coquimatlán quien administre la Procesadora, por el tema de metropolización de los cinco municipios conurbados como es Cuauhtémoc, Comala, Coquimatlán, Colima y Villa de Álvarez, “es completamente viable, como se prestaba el servicio del relleno sanitario, y muy respetable, si no puede administrarlo Locho Morán, pues así como lo hizo con el relleno sanitario que se lo dio al Gobierno del Estado, se lo vende a la administración estatal, porque no tuvo a lo mejor la capacidad, fue rebasado, o vaya usted a saber lo que sucedió, es respetable su rol de presidente municipal”.

¡Ahora hay algo que Leoncio Morán no ha dicho y es importante que la sociedad lo sepa, Locho absorbió lo más pesado del gasto que tenía la Procesadora, absorbió toda la nómina, la de los jubilados, la de los sindicalizados y ahí tiene a trabajadores dedicados al oficio de la carne, los tiene en los jardines, barriendo y pagándoles a los mejor, 15, 16 o 18 mil pesos, pagándoles los mismo que ganaban en la Procesadora y haciendo un trabajo que no amerita esa cantidad de dinero”.

“Locho se está intoxicando con ese dinero que está gastando y de la cual no tiene fuente de ingresos; la única salvación para él en estos momentos es ponerse de acuerdo con los legisladores, para que de manera legal sí sea extinguida la Procesadora, y planteando una alternativa de cómo se prestará el servicio de rastro”.

“Una alternativa viable es que si ya tiene a los trabajadores engrosando solamente su nómina, pues que ponga a los que ocupe y que reabra el rastro de manera municipal, directamente dependiente de la Dirección General de Servicios Públicos y eso le va a salir mucho más barato, mucho más económico”, dijo Raúl Barragán.

Indicó que tan sencillo como decir que él no tiene las habilidades para administrar el rastro, “porque él ha sido comerciante toda su vida, y entonces que delegue esta función y la concesiona, se asocia con Coquimatlán, o se la cede a los mismos tablajeros, porque finalmente hay un dictamen, que independientemente de la legalidad o no del mismo, deja la opción a los tablajeros de poderles ofrecer en comodato, pero lamentablemente desde el mitin que hizo afuera del Congreso, el viernes anterior (17), el presidente municipal ha cerrado completamente sus puertas al diálogo”.

El dirigente de los introductores de ganado, acusó que el alcalde está discriminando a la gente, supuestamente porque pertenecen a un partidos políticos distinto al de Leoncio Morán, “entonces él solo se siente presidente de la gente de Movimiento Ciudadano, cuando el debiera gobernar para toda la gente que le otorgó un mandato de servir al pueblo y eso está cayendo en oídos sordos”.